Marca: Bburago.
Origen: China.
Escala: 1/43.
Construcción: Carrocería en fundición; componentes en plástico duro y rueditas plásticas.
Año de fabricación: Medidados del 2004.
Fotos del auto real.
Un poco de historia.
A fines de 2002, el mundo ha sido testigo del lanzamiento de un tercer modelo de Porsche. El Cayenne, descrito por Porsche como un "automóvil para todo uso", se ha concebido con el fin de atraer a una buena parte del lucrativo mercado de los vehículos familiares de ocio, aunque para ello se verá obligado a enfrentarse a una competencia fuerte y bien establecida por parte de Lexus, Mercedes-Benz y BMW. Por supuesto, Porsche apunta más bien hacia una interpretación más moderna y dinámica, pero ello no significa que la tarea le vaya a resultar más sencilla.
El coche luce un frontal claramente reconocible como Porsche, con faros estilo 911 (N. del T: tipo 996) y grandes tomas de aire, pero la parte trasera ha constituído un verdadero reto para los diseñadores de Stuttgart. Nunca en la historia de Porsche un modelo había tenido que ser polivalente y ofrecer espacio para cinco adultos, su equipaje y alguna parafernalia adicional a través de cinco puertas. Las primeras reacciones a las fotos oficiales expuestas en el Salón del Automóvil de Ginebra fueron espontáneas. El ADN del coche es, sin duda, el de un puro Porsche, pero aun es difícil de determinar si el conjunto funcionará cohesionada y armónicamente. Algunos reporteros lo han calificado de "porcino" por su fornida apariencia, inusual para un Porsche.
Pero en varios países ya se está vendiendo más de lo que se esperaba.
Se han lanzado dos versiones de un motor V8 completamente nuevo de 32 válvulas y 4,5 litros para las primeras series de Cayenne. La versión S standard ofrece 340 CV, mientras que la Turbo es capaz de producir una vigorosa potencia de 450 CV.
Entradas de aire adicionales, nervadoras en el techo y 4 tubos de escape permiten distinguir al Cayenne Turbo del S.
Las primeras cifras oficiales para el V8 S contemplan una aceleración de 0 a 100 km/h en unos 7 segundos y una velocidad máxima de 240 km/h. Mientras tanto , se establece en menos de 6 segundos el tiempo del 0 a 100 km/h para el Turbo, y su velocidad máxima en 264 km/h, lo que resulta increíble para un vehículo de más de 2 toneladas, pues semejantes prestaciones se relacionarían más bien con un 911, y no con un todoterreno.
Porsche se propuso que el público se tomara en serio su tercer modelo, y lanzó una campaña publicitaria varios meses antes de la aparición del coche. Los anuncios mostraban la imagen de un 959 totalmente equipado, volando por encima de algunos paisajes accidentados, en su camino hacia la victoria del Paris-Dakar de 1985. Junto a ella se puede leer: "Sólo Porsche tiene semejantes antecedentes". Todo ello resulta muy conmovedor, pero en realidad lo del 959 distó mucho de ser un triunfo no cualificado. Una tardía y única victoria en el rally Paris-Dakar, y el hecho de que cada coche costara a la fábrica el doble de lo que marcaba su precio supusieron una corta historia para el experimento de Porsche en el Grupo B. Sin embargo, no hay duda del compromiso de Porsche por convertir al Cayenne en un triunfador. El tiempo dirá, sólo los modelos centrales de Porsche han tenido éxito, pero el triunfo del Boxster demostró que esto no era necesariamente cierto. Los compradores de coches actuales buscan lo exclusivo, quieren sobresalir de la masa, y la marca que compran habla por ellos. En este sentido Porsche ejerce una tremenda influencia, pocas firmas gozan del duradero impacto que produce Porsche. Además nunca ha existido un modelo Porsche tan especialmente concebido pensando en el hombre acaudalado de familia.
Fuente: La gran historia de Porsche (Stuart Gallagher - Helen Smith) 2003
El coche luce un frontal claramente reconocible como Porsche, con faros estilo 911 (N. del T: tipo 996) y grandes tomas de aire, pero la parte trasera ha constituído un verdadero reto para los diseñadores de Stuttgart. Nunca en la historia de Porsche un modelo había tenido que ser polivalente y ofrecer espacio para cinco adultos, su equipaje y alguna parafernalia adicional a través de cinco puertas. Las primeras reacciones a las fotos oficiales expuestas en el Salón del Automóvil de Ginebra fueron espontáneas. El ADN del coche es, sin duda, el de un puro Porsche, pero aun es difícil de determinar si el conjunto funcionará cohesionada y armónicamente. Algunos reporteros lo han calificado de "porcino" por su fornida apariencia, inusual para un Porsche.
Pero en varios países ya se está vendiendo más de lo que se esperaba.
Se han lanzado dos versiones de un motor V8 completamente nuevo de 32 válvulas y 4,5 litros para las primeras series de Cayenne. La versión S standard ofrece 340 CV, mientras que la Turbo es capaz de producir una vigorosa potencia de 450 CV.
Entradas de aire adicionales, nervadoras en el techo y 4 tubos de escape permiten distinguir al Cayenne Turbo del S.
Las primeras cifras oficiales para el V8 S contemplan una aceleración de 0 a 100 km/h en unos 7 segundos y una velocidad máxima de 240 km/h. Mientras tanto , se establece en menos de 6 segundos el tiempo del 0 a 100 km/h para el Turbo, y su velocidad máxima en 264 km/h, lo que resulta increíble para un vehículo de más de 2 toneladas, pues semejantes prestaciones se relacionarían más bien con un 911, y no con un todoterreno.
Porsche se propuso que el público se tomara en serio su tercer modelo, y lanzó una campaña publicitaria varios meses antes de la aparición del coche. Los anuncios mostraban la imagen de un 959 totalmente equipado, volando por encima de algunos paisajes accidentados, en su camino hacia la victoria del Paris-Dakar de 1985. Junto a ella se puede leer: "Sólo Porsche tiene semejantes antecedentes". Todo ello resulta muy conmovedor, pero en realidad lo del 959 distó mucho de ser un triunfo no cualificado. Una tardía y única victoria en el rally Paris-Dakar, y el hecho de que cada coche costara a la fábrica el doble de lo que marcaba su precio supusieron una corta historia para el experimento de Porsche en el Grupo B. Sin embargo, no hay duda del compromiso de Porsche por convertir al Cayenne en un triunfador. El tiempo dirá, sólo los modelos centrales de Porsche han tenido éxito, pero el triunfo del Boxster demostró que esto no era necesariamente cierto. Los compradores de coches actuales buscan lo exclusivo, quieren sobresalir de la masa, y la marca que compran habla por ellos. En este sentido Porsche ejerce una tremenda influencia, pocas firmas gozan del duradero impacto que produce Porsche. Además nunca ha existido un modelo Porsche tan especialmente concebido pensando en el hombre acaudalado de familia.
Fuente: La gran historia de Porsche (Stuart Gallagher - Helen Smith) 2003
Fotos del modelo a escala 1/43.
Contras: No me gustan sus proporciones, tampoco el exceso de pintura. Las terminaciones son bastante toscas. Se nota que es industria china, pero de baja calidad. Una lástima.
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